Y, de repente, una noticia nos sacude.
Mey Hofmann falleció ayer, en Barcelona. Todavía estamos en shock. Mey era un referente indiscutible, una maestra en el sentido más amplio y extenso del término. Con ella compartí numerosos eventos y viajes. Muchos reconocidos cocineros que están ahora tras los fogones han pasado por su Escuela. Leía ayer, en uno de los múltiples mensajes que le dedicaron en las redes sociales, que sus alumnos son su legado. Sí, un legado excepcional y extraordinario que perdurará durante generaciones. También leí este sentido artículo que escribió Pau Arenós y en el que trazaba un emotivo perfil sobre su persona.
Todos lloramos su pérdida. Todos nos unimos al dolor de la familia, de su equipo y Escuela.
Querida Mey, tú haces que, desde ayer, las estrellas desprendan dulces aromas de chocolate, vainilla y canela. Un beso enorme.
Un fuerte abrazo,
Romain Fornell y todo el equipo